El verano pasado estuve de vacaciones en Sevilla, en casa de mi amiga Mercedes y me puse tibia de comer estas tortitas, o como también las llaman tortillas de camarones (aunque extrañamente no llevan huevo). Desde entonces nos hemos acordado mucho de aquél viaje, de todos los rincones de Sevilla que visitamos y de sus tapitas, y de su rebujito (que aunque fuera de feria conseguí que me lo hicieran, yupi!!!).
El otro día en la pescadería vimos unos camarones pequeñitos, pequeñitos y como teníamos cena de picoteo marino variado pensé, voy a probar de hacerlas y “voliá” mi amigo Google me explico como hacerlas.
Quedaron buenas, muy buenas, pero claro el ambientillo no es el mismo...
Ingredientes:
150 gr. de camarones, 100 gr. de harina de trigo, 100 gr. de harina de garbanzo, 1 cebolleta, perejil picado, sal, pimienta, agua y aceite de oliva para freírlas.
Preparación:
Mezclaremos las dos harinas, iremos añadiendo agua hasta conseguir una masa (un poco más clara que la que conseguiremos al hacer un bizcocho), añadiremos la cebolleta trinchada pequeñita y el perejil y por último los camarones, salpimentaremos y reservaremos en la nevera un mínimo de una hora.
Pasado este tiempo pondremos en una sartén el aceite, cuando este bien caliente iremos añadiendo cucharadas soperas de la masa, cuando estén doraditas por los dos lados sacaremos a un papel absorbente. Comeremos calientes.
Con estas cantidades me salieron unas 12 unidades.
La harina de garbanzo la podemos encontrar en cualquier gran supermercado, aunque yo como fue algo un poco exprés tuve que hacer la harina en la thermomix pulverizando garbanzos secos.
Bon profit.
Puedo certificar y certifico que estaban muy,muy buenas.
ResponEliminaSi lo llego a saber me llevo las castañuelas y el traje de faralaes.En otra ocasión lo tendré en cuenta.
Quan he vist tortitas de camarones ja he pensat amb el rebujito!
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